Semana de oración – Todo lo que tengo es tuyo

Semana de oración en la iglesia Maranata

Todo lo que tengo es tuyo

El entonces le dijo: “Hijo, tú siempre estás conmigo y todas mis cosas son tuyas. Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque éste tu hermano estaba muerto y ha revivido; se había perdido y ha sido hallado”. Lucas 1531-32

Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia. 2º Pedro 13

Este es el último día de la semana de oración unida en la iglesia Maranata. Será a las 20:00. Click para ver cómo llegar.


Una vez alguien dijo que obtendremos el máximo rendimiento de nuestras oraciones y de la lectura del Nuevo Testamento si lo hacemos como si nosotros mismos fuésemos fariseos. Esta parábola sobre los hijos perdidos iba destinada originalmente a los fariseos que estaban cerca. Fueron ellos los que se pusieron el reto de poner el final de la parábola: decidir si entrarían o no en la casa del Padre, que se goza por el segundo nacimiento de su hijo pecador. Ya sea uniéndose a la celebración, aceptar a los pecadores y regocijarse junto al Padre; o bien creyendo en la garantía del Padre, de que todo lo que él tiene es de ellos

Todo lo que tengo es tuyo

El problema que tenemos todos nosotros, es que constantemente estamos pensando que necesitamos más cosas (algo más o algo nuevo) con el fin de poder ser buenos cristianos y poder hacer las cosas que Dios nos ha llamado a hacer. A menudo carecemos de la sencilla felicidad de cada día de estar donde estamos, a pesar de todos los obstáculos visibles. Cuesta creer lo ricos que somos buscando lo que se oculta bajo nuestros propios pies. Es difícil de creer que el tesoro es Cristo en nosotros y el hecho de que Dios ha hecho su hogar en nosotros. Es difícil de creer que tenemos todo lo que necesitamos para llevar una vida piadosa

Como la iglesia de Europa, nosotros a veces nos parecemos a Jacob, que exclamó al despertarse: “¡Seguramente el Señor ha estado en este lugar y yo no he sido consciente de ello!” Las palabras: “Hijo tú siempre estás conmigo, y todo lo que tengo es tuyo”, se pueden aplicar también a nosotros en el continente más ateo del mundo. Tenemos todo lo que se necesita para una vida completa con Dios y todo lo que tenemos que hacer es entrar. Dios se cuidará del resto

Oremos:

  • Por la renovación de la iglesia en su amor por las personas.
  • Para que nosotros, como iglesia, estemos dispuestos a dejar la seguridad de nuestro gueto y buscar a los perdidos.
  • Para que comprendamos la riqueza y la grandeza de la vida en Cristo; que nosotros, como pueblo de Dios debemos caminar todos los días con la certeza de la presencia de Dios.
  • Para que surja una nueva generación de evangelistas en la iglesia, que sean capaces de describir la plenitud del reino de Dios y compartir el Evangelio con el poder del Espíritu Santo y la sabiduría que viene de lo alto.
  • Para que este año, nuestras iglesias puedan gozarse con más gente, que han aceptado la invitación del Padre y creen en su Hijo.
  • Por nuestros seres queridos que están muertos espiritualmente y por nuestro deseo de que tengan
    una vida espiritual.